Leo en Bloomberg que el presidente estadounidense Barack Obama ha calificado de ‘emergencia nacional’ la situación en la que se encuentra EE.UU. frente a ciberataques externos, y por ello ha redactado una Orden Ejecutiva (PDF) en la que se dictan sanciones económicas contra aquellos que utilicen medios informáticos para atacar los intereses de EE.UU., tanto en territorio norteamericano como en el exterior. En principio, la nueva ley permitirá al departamento del tesoro congelar activos económicos radicados en EE.UU. de personas físicas o jurídicas cuyas actividades afecten la seguridad nacional, la política exterior, o la economía norteamericana. Aunque el documento se ha querido presentar como un medio para combatir el espionaje de países extranjeros o el robo de secretos industriales y comerciales, la redacción de la orden ejecutiva supone de-facto que las personas que realizan donaciones a Snowden, Assange o cualquier otra voz contraria a las políticas estadounidenses puedan sufir sanciones y embargos de sus cuentas en bancos norteamericanos. La respuesta inmediata ha sido un incremento en las donaciones a Snowden via Bitcoin. Además, un ciudadano de Oregon ha llamado a la desobediencia civil contra la orden ejecutiva realizando una donación a Snowden, y autoinculpándose de manera pública. Por otro lado, la nueva orden ejecutiva también podría usarse para dificultar el trabajo de los profesionales de la ciberseguridad, ya que se penaliza la tenencia de herramientas y medios tecnológicos para realizar ataques, que en muchos casos resultan ser las mismas herramientas usadas para el diseño de herramientas de protección y el estudio no belicoso de vulnerabilidades. Más opiniones en Slashdot y en Hacker News.
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