Llegó el día de Carnaval a primaria. Desde primera hora, los alumnos llegaron vestidos con sus disfraces más creativos, transformando el día en un despliegue de imaginación y color. Durante toda la jornada, las aulas se convirtieron en un escenario de diversidad, donde lo que cada alumno sueña con ser de mayor cobró vida. 

Por la tarde, la emoción alcanzó su punto culminante con un desfile. Los niños desfilaron con orgullo, mostrando sus atuendos únicos mientras la música festiva llenaba el ambiente.

La celebración del Carnaval no solo fue un día de diversión, sino también una oportunidad para fomentar la creatividad, el compañerismo y el espíritu de equipo entre los estudiantes.

 ¡Que viva la alegría y la magia del Carnaval!

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